La Ilíada (lecciones II)


Sigo con La Ilíada. Poco a poco y buena letra. Buenísima, de hecho.


En el Canto IV, se lee esta maravilla: "Ayaxes, caudillos de los intrépidos argivos, a vosotros no tengo nada que encomendaros; ¿cómo voy a exhortados para que alentéis a vuestros soldados, si no hay exhorto como vuestro ejemplo?"
Ahí lo tenemos: el refrán castellano, veinte siglos antes: "El mejor predicador es Fray Ejemplo".
Ahí la tenemos: la solución para la credibilidad de los políticos (de los gobernantes, en general): ir por delante.
Ahí la tenemos: una de las claves de la educación: exhortar con el ejemplo.

La Ilíada, una obra maestra en que literatura, aventura y enseñanza moral -a pesar de lo burdo de ciertos comportamientos griegos- está unidas.

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