Me imagino que los neologismos tienen que pasar por un cierto recorrido para ponerse de moda y ser conocidos. Me encantaría que existiera este que hoy propongo. Más que nada porque está de moda crear palabras: homofobia, transfobia, gayfobia, lesbofobia... Y tienen un uso. Hay que tiene miedo -fobia viene de ahí- a las alturas: sufre acrofobia. O al agua, y sufre hidrofobia.
Y hay quien tiene miedo a tener hijos. Y a quienes tienen hijos. Al compromiso que supone tenerlos. Son los teknófobos. Espermos que pronto superen ese miedo.
(Apunto que techné es otra cosa. De ahí sí viene ténica. Son dos letras diferentes: la ji y la kappa. Sólo que hay quien dice khi. Y de ahí viene la confusión. La típica que muchos saben es arjé: arché o arhké. Los presocráticos y todo eso...)
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