No hay que decir mucho más que lo que todos vimos: si alguien se hubiera propuesto una propaganda para revalorizar el valor de tener mujer e hijos, no habría encontrado casi nada mejor que lo de ayer. Es un fenómeno que ya ha sucedido antes y que seguirá así.
Unas breves reflexiones.
Primera: los jugadores del Barça tienen menos de 30 años. Alguna excepción habrá. La media del primer hijo en España es de 30 y unos meses.
Muchos están con hijos. Y con más de uno. ¡¡Hasta con 3, cosa que les coloca ya muy por encima de la media de hijos en España y Cataluña!! Y son padres desde muy jóvenes. Y hubo, además, besos y caricias, y padres haciendo de padres: haciendo el tontaina con los hijos, como debe ser, sin ninguna vergüenza a ser juzgado. Conclusión posible: ¿qué pasa cuando uno tiene la vida solucionada económicamente? Es más que probable que uno valore más -primero vivir, luego filosofar- las cosas que tienen incluso más valor que el dinero. Como son el amor y sus componentes naturales: la familia. Quizás los gobernantes deberían tomar nota. Nuestra sociedad es altamente castrante en lo que a matrimonio e hijos se refiere: no solo no ayuda, sino que pone pegas. Parece que solo unos privilegiados -adinerados- pueden disfrutar. Eso debería abrirnos nos ojos y poner más fácil la adquisición de lo necesario para formar una familia. A esto cabría sumar el gran hedonismo que parece movernos: primero vacaciones en Cancún; luego ya pensaré en casarme y tener hijos. Pero vuelvo a lo mismo: si no fuera tan difícil, más matrimonios e hijos habría. Dejo el tema abierto.
Muchos están con hijos. Y con más de uno. ¡¡Hasta con 3, cosa que les coloca ya muy por encima de la media de hijos en España y Cataluña!! Y son padres desde muy jóvenes. Y hubo, además, besos y caricias, y padres haciendo de padres: haciendo el tontaina con los hijos, como debe ser, sin ninguna vergüenza a ser juzgado. Conclusión posible: ¿qué pasa cuando uno tiene la vida solucionada económicamente? Es más que probable que uno valore más -primero vivir, luego filosofar- las cosas que tienen incluso más valor que el dinero. Como son el amor y sus componentes naturales: la familia. Quizás los gobernantes deberían tomar nota. Nuestra sociedad es altamente castrante en lo que a matrimonio e hijos se refiere: no solo no ayuda, sino que pone pegas. Parece que solo unos privilegiados -adinerados- pueden disfrutar. Eso debería abrirnos nos ojos y poner más fácil la adquisición de lo necesario para formar una familia. A esto cabría sumar el gran hedonismo que parece movernos: primero vacaciones en Cancún; luego ya pensaré en casarme y tener hijos. Pero vuelvo a lo mismo: si no fuera tan difícil, más matrimonios e hijos habría. Dejo el tema abierto.
Segunda: hubo un comentarista que se enfadó porque decía que, con esta nueva moda de celebrarlo con la mujer e hijos, el aficionado, que es quien había sufrido el desplazamiento, quedaba en segundo lugar. Tiene su parte de razón. Pero es que el trabajo es para uno y para su familia, que es la mayor parte de uno: quiero a mi familia y vivo para ellos. Lo lógico es -¡qué gran lección y qué grande que fuera involuntaria, no buscada: natural!- que lo primero es la familia: la mujer e hijos. Un hijo de Sergio Busquets llevaba la camiseta con el nombre de su padre. Así, "PAPI"; y no "Busquets". Lo importante es que es mi padre.
Ahí va este vídeo que todos hemos visto ya, me imagino.
(Que conste que soy del Madrid, pero ayer celebraron estos, y así de bien están las cosas en este campo).
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